de Crímenes imperfectos
Esta serie de documentales es la típica que nadie reconoce ver y que, sin embargo, puede llenar tardes de conversaciones en una cafetería con los amigos. Porque todo el mundo ha visto, y se ha quedado enganchado, al menos de dos o tres episodios. Consiste (aunque ya se que todos sabéis de que hablo) en la resolución de un crimen real, del que se van aportando pistas poco a poco hasta que se resuelve el asesinato. Es como ver CSI pero sin ficciones estrambóticas y sin planos sobre como se introduce una bala en el esternón de la víctima.
Entrevistas con los forenses, con los criminólogos (o criminalistas), y con los familiares y amigos de las víctimas acompañan a las imágenes y pruebas que se fueron encontrando en su día cuando se resolvió el caso. ¡Ah! Y por supuesto con recreaciones de asesinato, que ya las quisiera Iker para su programa.
El caso es que, otra vez, la realidad supera a la ficción con creces. Además de ese deseo de convertirnos en un CSI (y que no nos dieran ascos los chichorros) que todos llevamos dentro, esta serie hace que uno se plantee lo lejos que puede llegar el ser humano cuando se pone a pensar. Y se asuste por ello.
Una alegría cuando una está haciendo zapping y se lo encuentra en la sexta. Igual, igual que me pasa con el programa ese del muro. ¿Alguien lo ha visto alguna vez? ¿Alguien a soportado más de un baño en la piscina de un concursante con pinta de espermatozoide embutido en un preservativo gris? ¿Cómo llegas a plantearte el participar en eso si no es en medio de un pedo descomunal con los colegas el fin de semana? ¿No tiene la gente lagunas al día siguiente? ¿Tanto se bebe en este país?
Entrevistas con los forenses, con los criminólogos (o criminalistas), y con los familiares y amigos de las víctimas acompañan a las imágenes y pruebas que se fueron encontrando en su día cuando se resolvió el caso. ¡Ah! Y por supuesto con recreaciones de asesinato, que ya las quisiera Iker para su programa.
El caso es que, otra vez, la realidad supera a la ficción con creces. Además de ese deseo de convertirnos en un CSI (y que no nos dieran ascos los chichorros) que todos llevamos dentro, esta serie hace que uno se plantee lo lejos que puede llegar el ser humano cuando se pone a pensar. Y se asuste por ello.
Una alegría cuando una está haciendo zapping y se lo encuentra en la sexta. Igual, igual que me pasa con el programa ese del muro. ¿Alguien lo ha visto alguna vez? ¿Alguien a soportado más de un baño en la piscina de un concursante con pinta de espermatozoide embutido en un preservativo gris? ¿Cómo llegas a plantearte el participar en eso si no es en medio de un pedo descomunal con los colegas el fin de semana? ¿No tiene la gente lagunas al día siguiente? ¿Tanto se bebe en este país?
3 comentarios
fridah -
kenderzico -
Saludetes.
Mapis -
Crímenes imperfectos es lo mejor que se ha emitido en este país desde la Superabuela