de Bone
Bone es la historia del moñaco que sale en el dibujo de la foto. Tanto él (Fone Bone) como sus primos (Phoney y Smiley), son expulsados de Boneville debido a unos chanchullos económicos que montó Phoney, y que injustamente salpicaron a sus primos. Exiliados, se pierden en un desierto donde comienzan sus desventuras. Las distintas (y bastante incompatibles) personalidades de los tres, hacen que terminen discutiendo y separen sus caminos. Aunque ellos no lo saben, los tres terminarán en la misma ciudad, donde tendrán que enfrentarse a problemas similares a los que tenían en Boneville (por culpa de Phoney) y a otros muchos y muy nuevos, en los que estarán implicados un dragón, unas zarigüeyas, las (temibles y torpes) mostrorratas, el tabernero de la ciudad y una atractiva joven de la que Fone termina enamorándose perdidamente y tras la que se oculta algún misterio que va desvelándose a través de los sueños de ésta. Y ahí queda el camino abierto para el montón de aventuras que les va a tocar vivir a los protagonistas de la historia.
Es un tebeo divertidísimo y encantador, sobre todo en el principio. La presentación de los personajes es muy buena y a las tres hojas ya les has cogido cariño. La historia está ambientada en una especie de ciudad medieval, y aunque se termina por enredar un poco, es bastante consistente. Y los libritos están llenos de aventuras con malos malísimos y buenos encantadores y adorables, que aunque no tienen la ventaja física, urden mil argucias para salir del paso en cada uno de los peligros que se van encontrando. Las chicas son en este caso las guerreras. Tanto la protagonista como su abuela, que cuida vacas para hacer carreras, son de armas tomar. Hay situaciones también bastante delirantes que se apoyan en la indefinición corporal de los protagonistas. Y que el autor aprovecha para “convertirlos” en no humanos cuando no lo necesita y a que parezcan adultos sensatos cuando le parece necesario.
La parte negativa, es que tiene altibajos de intensidad y hay algún número un poquillo aburrido. La historia empieza muy fuerte y luego decae algo, no es una caída en picado ya que va teniendo repuntes a lo largo de las distintas aventuras, los brillantes toques de humor son cada vez más escasos y desde luego no se llega a alcanzar en ningún momento la estabilidad del principio.
Hay juego de ordenador y moñacos de plástico. En este caso un fallo muy importante es que no se haya sacado el peluche del muñeco, ya que hay un millón de veces durante la historia que te gustaría entrar y darle un abrazo gigante al bichito, que alcanza cotas de monería que se salen del mapa.
3 comentarios
kenderzico -
Chewi -
Te quedaste frito como Bone?
kenderzico -