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Soy fans y me he hecho un blog.

de Paloma San Basilio

de Paloma San Basilio

No quiero ir de fans a muerte de Paloma, como los hay muchos y muy buenos. A los que se puede leer en la red diciendo maravillas de su ídola. No tengo ninguno de sus discos y no he ido a ninguno de sus conciertos. Apenas se nada de su vida, únicamente he visto alguna entrevista suelta por la tele haciendo zapping. Pero me encanta esta mujer. Me encanta sobre todo después de haberla visto en Victor o Victoria. Como ya le paso a la Andrews en la película, no hay bicho viviente que se trague que es un tío. ¿Pero qué importa? Esta mujer canta como los dioses, y sobre el escenario tiene esa aureola que rodeaba a las divas del cine clásico y encima actúa. Y es que, en mi opinión, ella es lo más cercano a una diva que tenemos en España (Terremoto no incluida). Grande además, porque actúa como tal. Véase su gira Diva.

 

Como salimos del teatro enamoradas de ella, y de Paco Valladares, nos fuimos para la salida de actores para conseguir el autógrafo correspondiente, y para felicitar a toda la gente que había participado en la obra, porque no se encuentra una habitualmente un espectáculo de esas magnitudes en el que todo el mundo esté tan a la altura. Prudentes, y no tan envalentonadas como nada más salir del teatro, esperamos en la acera de enfrente. Y vimos salir a Paloma, un enorme coche negro la esperaba en la puerta. Con un pañuelo en la garganta, salió, fue cortés con los que la esperaban y se los despachó en 6 segundos, dejándolos contentos y dándoles con la puerta en las narices. Toda grande y diva ella. Diré también, que cuando decidimos cruzar, salió Paco Valladares, que nos atendió de mil amores y que puede que por su voz o sus maneras me pareció también un caballero de los de antes.

 

En la tele sin embargo, en las entrevistas que yo le he visto, siempre la había visto mucho más “campechana”, aunque no tanto como el rey. Incluso cantando el “Juntos” y contando la anécdota de que una vez estuvo en un karaoke y salió a cantarla. Recordaba que toda la gente que estaba allí se puso de rodillas y la alabaron como si se tratase del mismísimo Alá. Si pudiera elegir haber estado en un lugar de un tiempo pasado, este estaría entre los 1000 primeros (es que una es muy friki). Eso sí, si alguien me preguntara fuera de este blog, diría que mi sueño sería estar en Berlín, para la caída del muro o en La Pinta, mirando por la borda el nuevo continente. Que para quedar de petarda, siempre hay tiempo.

 

El caso es que espero que Paloma tenga ganas y salud para estar mucho tiempo encima de los escenarios. Y si puede ser haciendo musicales mejor que mejor. Yo no pienso perderme ni uno, lo prometo.

 

Por cierto, Liza Minelli estará este 15 de agosto en Santander. Por muy gorda y alcoholizada que esté, quiero que se sepa que envidio a muerte a todo el mundo que pueda ir. Entradita en patio de butacas 140 €, para todo lo demás Mastercard.

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